Defender la Constitución es despenalizar el aborto
Adriana Guzmán
Julieta Paredes
El debate hoy no es sobre el aborto, es sobre
la inconstitucionalidad de penalizar nuestras decisiones, pero la
desinformación, el machismo y la doble moral de la sociedad y las instituciones
nos ha llevado a este debate dejando que se monten sobre él la derecha, el
comité cívico de Santa Cruz y la iglesia católica que ya no tenía qué decir en
un país laico, estas manifestaciones conservadoras atentan no solo contra la
autonomía del cuerpo de las mujeres sino contra la Constitución Política del
Estado Plurinacional que ha sido fruto de nuestras luchas y por eso exigimos
responsabilidad.
Primero, el Tribunal Constitucional tiene que
pronunciarse ante la demanda de inconstitucionalidad de 13 artículos del Código
Penal, hecha por la asambleísta Patricia Mancilla, ese es su trabajo, velar
porque los Códigos no vulneren la Constitución no consultar a la Iglesia cuál
es su opinión ¡Somos un país laico pues!
Segundo, el trabajo del Estado es garantizar
que el debate sobre la inconstitucionalidad sea con información y con
argumentos, no un debate desde el amedrentamiento, la culpa, los mitos, las
mentiras, la manipulación y las amenazas que ha venido haciendo la iglesia, que
aunque dice que no dijo nada sobre la excomunión, ha dejado claro que ese será
el castigo para quienes apoyen la despenalización del aborto que en el fondo es
defender la Constitución. De todo este asunto quien ha salido bien parada es la
iglesia con la complicidad de los medios de comunicación. Por eso, desde el
feminismo comunitario convocamos a las y los católicos a responder y defendernos con la
APOSTASÍA, que es como desbautizarse de la Iglesia Católica, usando la libertad
de conciencia. Porque ser apóstatas es un acto profundo de descolonización de nuestros
cuerpos, de nuestras cabezas, de nuestros ajayus y de nuestros credos.
Tercero, en un proceso de cambio que es de los
pueblos y no de los gobiernos la responsabilidad política de las organizaciones
sociales es defender lo que vamos logrando, las transformaciones que vamos
haciendo, en este caso es defender la Constitución, pero las declaraciones de
dirigentes de la CSUTCB y dirigentas de la Confederación Bartolina Sisa que
dicen estar en contra de la despenalización obviamente ponen en duda esta
responsabilidad. Compañeras y compañeros ¡Penalizar el aborto es inconstitucional!
es además colonial y patriarcal ¿Acaso ustedes no han luchado también por esta
Constitución? ¿Acaso ustedes no acaban de salir de la cumbre antimperialista y
anticolonial? ¿Acaso la iglesia no es colonial y colonizadora? Frente a estas
opiniones que entendemos son personales y no son la posición de las
organizaciones, desde el feminismo comunitario convocamos, primero a que las y
los dirigentes se informen antes de opinar, despenalizar el aborto no es
legalizar el aborto, y segundo, convocamos
a hacer un debate amplio dentro de las organizaciones en defensa de la
Constitución, de la autonomía, de la descolonización y de la
despatriarcalización, porque defender la Constitución es despenalizar el
aborto.
Asamblea de Feminismo Comunitario